Fiestas en plena crisis. Isabel Vilà de Cal Porrerà. Priorat

Eran las once de la noche en Cal Porrerà, la casa de turismo rural en Porrera, en el corazón de la comarca vinícola del Priorat, en Cataluña. Viendo el casi centenar de personas felices, celebrando la ceremonia de compromiso de Isabel Vilà y Eduardo Durán, me parecía increíble que sólo unas horas antes hubiera estado en una Barcelona en que el fantasma de la crisis pesa como una losa.


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Los que hace tiempo que seguís mi blog ya conoceréis a Isabel Vilà, uno de los personajes de “Vidas en calma” y también su casa de turismo rural en Porrera, a donde se mudó tras abandonar el mundo del periodismo. Un lugar al que ya me referí en “Si me pierdo, buscarme en Cal Porrerà”.

Isabel estaba muy guapa y feliz, rodeada de su familia y sus mejores amigos. Ella y Eduardo habían decidido formalizar su relación en público. Podríamos decir que forman una de las familias actuales, con dos hijos procedentes de sus anteriores relaciones cada uno, Andreu y Nil, que firmaron en el documento de compromiso. La fiesta se celebró en el amplio “celler” (bodega) de Cal Porrerà.  La comida, contribución de los asistentes, llenaba las mesas. Y como no podía ser de otra manera el vino del Priorat fluyó sin parar. Empezando con “el Trosset de Porrera”,algunas de las 1300 botellas del vino que producen los hermanos Eduardo y Diego Durán , Vall Llach, Ardèvol, Mas de’n Gil (blanco) o Sant Genis i Vaqué (blanco).
Isabel y Eduardo me comentaron que pasados los meses de enero y febrero, difíciles, la casa rural va viento en popa. Aparte de los que llegan por primera vez sin conocer a nadie, funciona muy bien el boca a oreja. Todos los que han estado lo recomiendan a sus conocidos. No me extraña.

Hubo un momento, a la una de la noche, viendo a muchos asistentes sentados en las escaleras, en el exterior, conversando a viva voz , pregunté: “¿No hay ningún vecino que se queje?”. “¿Vecinos?” me respondieron. “Si están todos aquí”.

 En el escrito que Sandra Montaner dedicó a los novios, decía: “Y es que, a pesar de la crisis y de las crisis, resulta que las cosas pueden salir tan bien como estas. Y es por eso que esta es una gran fiesta, la fiesta del éxito, la fiesta de las cosas bien hechas, una fiesta que demuestra que sí, que vale la pena tener paciencia, tener amigos y tener…"

¡Felicidades queridos Isabel y Edu!

Fotos tomadas con una cámara compacta Canon S95