MONASTERIO BENEDICTINO. ENGELBERG, SUIZA
En un reciente viaje a Bretaña escribía un post entre diferencias entre fotógrafos profesionales y aficionados, remarcando que habían unos cuantos aficionados avanzados que hacían tan buenas fotos como muchos profesionales. Pero explicaba que sobre todo era una cuestión de actitud. Y creo que aquí he encontrado un pequeño ejemplo.
Este es el monasterio benedictino de Engelberg, en Suiza. Un grupo de una docena de periodistas y fotógrafos internacionales lo íbamos a visitar por la tarde. El pronóstico del tiempo era malo. Por la mañana, a las nueve, pasamos cerca camino de Bruni donde nos esperaba el divertido descubrimiento de los "Happy feet" ( Pies felices). La experiencia es un grado y me ha ocurrido muchas veces en países nórdicos y centroeuropeos en que he buscado como un desesperado un rayo de sol durante días. En esta ocasión la luz no era gloriosa, pero había un resolillo interesante que incidía sobre el techo del monasterio. ¿Qué pasaría por la tarde? Aquí hay que aplicar siempre el dicho de "Más vale pájaro en mano que ciento volando". El grupo iba a paso rápido en busca del teléferico. Me separé un centenar de metros y tomé un par de fotos. Luego tuve que alcanzar a mis compañeros a la carrera.
A la vuelta de Bruni, después de comer, volvimos a pasar por el mismo lugar, ya bajo la lluvia. Otra vez me volví a separar del grupo, disperso ya en busca del cobijo del hotel, sólo para fotografiar el monasterio y usarlo como ejemplo didáctico.
¿A que es mucho mejor la primera foto? ¿Es mejor el fotógrafo de la primera foto que el de la segunda? No, es el mismo, pero no se puede hacer nada más. Lo dicho, en fotografía "Nunca dejes para mañana lo que puedas fotografiar hoy si la luz y las condiciones son buenas"
Como comenta el amigo Guillem Calatrava, de Naturpixel, a él le pasó algo parecido y también en Suiza, pero no hizo la foto y acaba dando el mismo consejo que doy yo, sobre todo si trabajas en el Norte.
Como comenta el amigo Guillem Calatrava, de Naturpixel, a él le pasó algo parecido y también en Suiza, pero no hizo la foto y acaba dando el mismo consejo que doy yo, sobre todo si trabajas en el Norte.
Muy buen artículo Paco... eso me recuerda un artículo que publiqué en mi blog sobre este mismo tema, además, curiosamente, también en Suiza... http://guillemcalatrava.com/2010/08/23/la-fotografia-que-no-capture/
ResponderEliminarSaludos!
doncs si ,molt bona observacio en el teu article d'avui..ja saps que no participo massa, pero segueixo el teu post diari a diari!t'envio records antipodians!salut!
ResponderEliminarIncreíble. Esa nube está tapando completamente la montaña. No es una cuestión de perspectiva, ¿verdad?
ResponderEliminarUn saludo
Manuel Bustabad
Menuda diferencia, gran consejo Paco!
ResponderEliminarOtra clase tan magistral como sencilla del Profesor Elvira.
ResponderEliminarUn abrazo.
La importancia de saber lo que uno quiere...
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias Paco, iremos aprendiendo poco a poco, un saludo
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