sábado, 11 de febrero de 2012
Fotos desde mi ventana. Morir a los 108 años
De hecho el titular del post es ligeramente falso. Mi vecino, el señor Muntané, murió el pasado miercoles a la edad de 107 años. El jueves habría cumplido los 108 años. No tenía ninguna más y he vuelto a publicar esta foto que le tomé hace 3 años o sea cuando tenía 105 y salía cada mañana a dar su paseo diario o a comprar el pan. Era de la zona catalana del Pallars Sobirà, en pleno Pirineo, en donde vivió mucho tiempo y seguro que influyó mucho en su buena salud aparte de sus hábitos saludables. Todos los vecinos lo queríamos mucho por su simpatía, amabilidad y lucidez. Vivió bien hasta hace unas pocas semanas en las que se fue apagando poco a poco. En su caso se puede aplicar perfectamente la expresión "Murió de viejo".
Descansi en pau estimat senyor Muntané.
Esto sí es una vida literaria, una historia natural del paso de la vida, una sabiduría plena. Una imagen preciosa de cómo vivir y esperar el final sentado en una vía única, flotando entre ramas de árboles como si flotara entre nubes. Una alegoría, una metáfora, como puede ser la vida. Cuando he leído el titular he pensado en el Dr. Broggi, de 104 años. ¡Cuántas cosas han visto vivido y sufrido éstas personas! ¡Cuánta sabiduría dejan y se llevan! Ya dicen los indios cri de Canadá que "cuando muere un anciano, muere un árbol".
ResponderEliminar¡Cómo me habría gustado estar horas con el señor Muntané sentada en su banco escuchándole hablar!
Y qué afortunado ha sido el señor Muntané de morir en su paseo natural, y no en una residencia. Y qué suerte ha tenido de tener a un buen vecino fotógrafo que ha podido trascender su largo paseo hasta el final.
Seguro que descansa en paz.
Una sonrisa para el señor Muntané.
Y gracias, Paco*
Uf... Eso es vivir y como bien dices, morir de viejo. Parsonas así y no solo por la edad, parecen sacados de una mente literaria brillante. A veces, la realidad supera con creces a la ficción. Afortunadamente.
ResponderEliminarDescanse en paz.
La imagen, con las hojas desenfocadas y el Sr. Muntané sentado, viéndolas venir es de una subjetividad absoluta.
Descanse en paz.
ResponderEliminarSi todos tuviesemos la capacidad de vivir la vida con tanta dignidad y entender la necesidad de ser simpáticos,amables y lúcidos ademas de esos antecedentes rurales que años atrás se veían con cierto atraso puebleril, pero que con el tiempo y las modas, ahora existe esa necesidad de optar por otro tipo de vida mas sana, más acorde con la naturaleza, esa que seguramente al senyor Muntané le alargó la vida, al igual que la que da fuerzas a mi padre y a tantas personas que han vivido de su propio sudor, trabajando a sol y a sombra la tierra y con ello dejándonos un patrimonio y unos valores difíciles de comprender por quienes menosprecian a los que vivieron y padecieron de su propio esfuerzo.
ResponderEliminarUn recuerdo emotivo para el señor Muntané !
Esas personas maravillosas, hechas de "buena madera" como decía mi abuelo, son los Maestros que a veces no aprovechamos cuando están vivos, vienen a enseñarnos entre otras cosas: el valor de la paciencia, de la perseverancia, de la calma, de lo que es realmente importante y trascendente, de lo atemporal, de la sabiduría que sólo te dan los años...a veces pasamos a su lado y los vemos sin mirarlos, los oímos sin escucharlos, los tenemos sin valorarlos,por eso Paco, felicidades por este homenaje que le brindas al Señor Muntané,q.e.p.d. que éste sea un homenaje extensivo a todas aquellas personas extraordinarias que como él, enriquecen nuestras vidas.
ResponderEliminarUn abrazo desde el otro lado del mundo.
C.
Precioso comentario, Eva.
ResponderEliminarY si Jan, era un personaje de novela.
Gracias Logio y también a ti, Maria Rosa.
Lo has definido a la perfección C, gracias y un abrazo.
Puedo ver, en el Sr. Muntané la misma imagen de mi padre, que ahora vive conmigo, va a cumplir los 100 en plenas facultades, y con una memoria, una vivencias, unos recuerdos de profesión impresionantes, como dicen sus nietos "el abuelo es la wiquipedia"....le puedes preguntar lo que quieras....y su paseos imperdonables, sus tardes con el ordenador, su lectura y sus ganas de vivir y celebrar los 100 por todo lo alto.....
ResponderEliminarPor eso contemplar esta foto, que como dice Eva, flotando entre las ramas, que para ellos no es perder el tiempo sino todo lo contrario, ir recuperandolo para seguir viviendo.
Entrañable la fotografia.
Maribel
Que sirva también esta foto como un homenaje a tu padre, Maribel. Envíale un saludo de los más cordial de parte mía.
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