RETRATO DE UNA CHICA Y SU GATA

MARISOL Y SU GATA DIXI

RADIOGRAFÍA DE LA PATA DE DIXI

(ENGLISH TRANSLATION)

Este es un intento de aprovechar Internet para un fin solidario. Os cuento la historia. Marisol es una joven que como el 63% de los trabajadores españoles es mileurista. Le cuesta llegar a fin de mes, vive en un piso compartido, sin ascensor, en el barrio de la Ribera de Barcelona y tiene una gatita, Dixi. Hace unos días Dixi cayó a la calle desde la terraza del inmueble. Por desgracia sé lo que es eso. Tengo una gata Taca, a la que llamo la gata voladora, que se me cayó dos veces a la calle desde la altura de un octavo piso y otra por el patio de luces. Alguien me explicó que los gatos no tienen memoria, aunque aprenden. Taca es la prueba viviente. Hace ocho años desde su última caída y ahora se pasea como una experta por la cornisa. Es una prueba indiscutible de las teorías de Darwin.
Marisol recogió a su gatita malherida y, sin vacilar, la llevó a un veterinario. Dixi estuvo más de una semana en observación: radiografías, análisis y una intervención quirúrgica en la pata izquierda. Resultado: una factura similar al sueldo mensual de Marisol que, por supuesto, no puede pagar.
Se me ocurrió una posible solución. Les hice un retrato a Marisol y a Dixi y lo vendimos a través de Internet para pagar la factura del veterinario. 100 copias, numeradas y firmadas por mí, de dicho retrato al precio de 10 euros.

Ha pasado ya bastante tiempo y la historia funcionó. Marisol pagó la factura y Dixi, fue mamá. Aquí podéis ver las fotos del final feliz.