El jueves 11 de diciembre, Teresa Gimpera, Colita y yo, presentamos en la Casa del Libro la publicación
Memòries de Barcelona, con fotos de
Xavier Miserachs y Colita, editado por
Lupita Books. El libro es un documento extraordinario de la vida en Barcelona de los años cincuenta, sesenta y principios de los setenta hasta el fin de la dictadura franquista en 1975. Además de los magníficos retratos de Colita de los personajes de la llamada
Gauche Divine, formada por escritores, artistas, actores, modelos, cineastas, fotógrafos y arquitectos, en que los dos autores se movían como pez en el agua, el libro es un homenaje a la figura de Xavier.
Me gustaría destacar las emotivas palabras de Colita al rematar su intervención y que me recordó a la figura de
Peter Pan. Colita dijo que Xavier Miserachs no había muerto ni nunca lo haría .
Hoy recordamos a Xavier, continuó Colita, porque sus hijas, Arena y Mar han participado en la edición de este libro en que su espíritu está muy presente a través de sus fotos. Pero cuando ellas se hagan mayores, serán sus descendientes los que tomarán el relevo, así como los hijos de estos, que seguirán utilizando las fotos de Miserachs, testimonios imperecederos de un tiempo pasado y extraordinario.
No pude evitar trazar un paralelismo con la obra de James M. Barrie. Una Wendy ya adulta, y que ha olvidado sus aventuras de niña, descubre que Peter Pan, cuya edad permanece inalterable porque vive en el país de Nunca Jamás, ha visitado a su hija entrando por la ventana como hizo con ella mucho tiempo atrás. Y así, la figura de Xavier continuará viva e inalterable en el tiempo a través de su Nunca Jamás particular: sus fotografías. Y las generaciones que ya no veremos seguirán sonriendo ante los aspirantes a jugar la Copa Davis en su improvisada pista de tenis en Montjuich, ante el hombre de la chistera sobre la vespa y ante el perro que tenía la misma curiosidad que los humanos.
